Hay discapacidades que se ven… y otras que no
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada siete personas en el mundo posee una discapacidad; esto nos lleva a afirmar que representamos 15% de la población mundial, y en América Latina 14.7% con casi 85 millones de habitantes portadores de discapacidad física, sensorial o bien mental. Por ello, el diseño de experiencias turísticas accesibles, más que un lujo, es una necesidad, configurando así todo un segmento dentro de la industria, que incluye por supuesto el de reuniones.
Defino a los VIAJES ACCESIBLES como el conjunto de los servicios e infraestructuras que permiten el acceso a cualquier destino y dentro de él a cualquier actividad recreativa.
Ahora bien, no sólo este grupo a la hora de planificar sus viajes necesitará del diseño de experiencias inclusivas, porque de acuerdo a la Organización Mundial del Turismo (2015), las personas que se incluyen en este target son también aquellas recién operadas, personas con muletas o que están temporalmente en silla de ruedas debido a un accidente; turistas con equipaje y niños en cochecitos, personas gestantes, de baja estatura o con sobrepeso. Otro ejemplo, una persona de gran estatura que necesita una cama de mayor medida, en el lugar de alojamiento.
Aspectos económicos
El turismo accesible y adaptado ya tiene un impacto económico de más de 58 millones de dólares sólo en Estados Unidos, y según la OMT, el mercado potencial de las personas con discapacidad dentro de la Unión Europea es de más de 80 millones de personas, número que se eleva a 130 millones si se suman sus acompañantes, pues difícilmente una persona con discapacidad viaja sola.
Si ampliamos este análisis, el mercado de Asia-Pacífico tiene un público potencial de 690 millones de dólares, mientras que en Latinoamérica y el Caribe alcanza los 85 millones de personas. Por si fuera poco, un turista con discapacidad en Estados Unidos y Latinoamérica gasta, en promedio, 260 dólares por día, más que cualquier otro turista, mientras que en la Unión Europea la cifra asciende a 200 euros, cifra superior al promedio general.
Concluyo que el segmento al cual nos estamos refiriendo posee un excelente panorama si hablamos en término de negocio, no sólo por la demanda de este tipo de viajes, también —y sobre todo— por lo que el viajero con necesidades especiales está dispuesto a invertir en el destino que elige.
Mis recomendaciones…
Según la revista Condé Nast, sólo hay 10 agencias de viajes accesibles en el mundo, de allí que hay que ser cuidadosos a la hora de seleccionar qué empresa elegiremos para contratar nuestros servicios. Aquí algunos ítems a considerar:
- Garantía 100% del conocimiento de la agencia sobre el destino elegido por el cliente, es decir, que su staff haya testeado todos los viajes y sus experiencias.
- Poseer información completa, detallada y precisa de todos los aspectos del viaje (aeropuerto, hotel y tours seleccionados).
- Total grado de implicación del staff de la agencia para que, en caso de ocurrir algún imprevisto, el viajero pueda acudir a ellos cualquier día y hora.
- Contar con seguros de viaje y accidentes.
* Dra. Betina Anzilutti
CEO Noun Eventos & Capacitación Ejecutiva
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